Etiqueteros BIO: Innovación Sostenible para el Etiquetado
Los Etiqueteros BIO, hechos de materiales como almidón de maíz o azúcar de caña, son materiales biobasados, biodegradables y compostables. Se descomponen en el medio ambiente y se convierten en compost. No contienen sustancias perjudiciales, utilizan recursos renovables, reducen los desechos plásticos y promueven una economía circular.
Zócalos Cubre Palets
Estos zócalos, de igual calidad que los tradicionales, tienen un impacto ambiental un 10,3% menor. Fabricados 100% con plástico reciclado, incluyen un 20% de residuos de embalaje y cajas de fruta de clientes. Con este producto, hemos logrado reducir el impacto ambiental en un 51,4%.
BUMPERS
Son protectores para las cajas de pago en film LDPE, con posibilidad para acabados orgánicos. El resultado es un producto reciclado y reciclable que acoge al cliente en el paso más duro: pagar.
Nuestros bumpers sostenibles unifican piezas, pasando de dos perfiles (de aluminio y caucho) a un único perfil de material reciclado.
ZENITH: Sistema de Techos Laminados
El sistema ZENITH, hecho de materiales termoplásticos, es perfecto para espacios comerciales. Ofrece tres tamaños de lamas con recubrimiento foliado, proporcionando versatilidad en el diseño. Es resistente al agua y al fuego, con certificación B-S2-d0, y su perfil en «U» con ranurado cada 25 mm facilita la instalación. Destaca por ser ligero, fácil de montar, duradero y personalizable, adaptándose a las necesidades de cada proyecto.
Iluminación
Nuestros socios de iluminación optimizarán la cantidad de focos, la luminosidad y el gasto energético mediante mapas de calor para identificar las áreas con mayor flujo de personas. Ofrecen una amplia variedad de productos para encontrar la solución perfecta para cada proyecto. Una correcta iluminación reduce costes, disminuye las emisiones de CO2 y mejora el bienestar de clientes y trabajadores.
Poliuretano Orgánico
La gama Bõln está hecha de poliuretano derivado de residuos vegetales, lo que la hace reciclable y ligera, reduciendo así la huella de carbono en su logística. Los procesos de fabricación utilizan hasta un 70% menos de material en comparación con otros métodos similares y consumen menos energía gracias a la fabricación a baja temperatura.